Salida con cámaras desechables.

El pasado miércoles día 18 de diciembre pudimos visionar, en nuestra sede, el resultado de una experiencia “analógica” que se llevó a cabo el domingo 24 de noviembre.

La actividad, denominada “Salida con cámara desechable”, consistía como su nombre indica, en una salida durante la mañana con una cámara desechable de 27 negativos en color de 800 ISO que AFOGRA repartió días antes a todos los socios que quisieron participar en esta instructiva actividad.

La jornada debía empezar fotografiando la portada de un periódico del día y terminar, al filo de las dos de la tarde, fotografiando el toro de las populares Bodegas Castañeda donde se reunieron todos los participantes para compartir un típico “Calicasas”, mientras comentaban los detalles de la mañana fotográfica.

Durante la mañana cada participante tenia que fotografiar, con tema libre, la vida en Granada, sus calles y sus gentes, sus detalles y sus edificios, sin más herramientas que una cámara desechable. Contar una historia, hacer un bodegón, reflejar el entorno urbano o cualquier otra cosa que la imaginación y creatividad sugiriesen pero sin el apoyo de la tecnología que tan mal acostumbrados nos tiene.

Esta actividad tiene como finalidad tratar de recuperar, por un día, el ojo, la intuición y la paciencia del fotógrafo analógico sin la inmediatez que nos proporciona la cámara digital.
Recuperar una forma pausada y misteriosa de fotografiar en la que los disparos son finitos y hay que pensarlos muy bien, asegurándose de hacer la toma correcta en un ejercicio de introspección del fotógrafo puesto que los resultados no se verán hasta días después y sustituir la inmediatez de la cámara digital por la paciencia de la cámara analógica.

Intentar prever como será nuestra fotografía sin más ayuda que el visor y asegurar cada disparo, pues se dispone de un número muy limitado de negativos, es una experiencia enriquecedora que traerá buenos recuerdos a los fotógrafos que proceden del “analógico” y nuevas sensaciones a los que nacieron con el “digital” y, sin duda, obligará a cambiar la percepción y visión fotográfica, así como la forma de encarar una fotografía.

El resultado, variopinto y heterogéneo, ha sido bastante satisfactorio para todos y, a pesar de las limitaciones técnicas, el reto se ha resuelto bastante bien por parte de los fotógrafos participantes.

Siguiendo en este estilo analógico el visionado de las fotografías seleccionadas por cada autor se realizó con copias en papel de 10 x 15 lo que generó cierto “entusiasmo” entre los socios asistentes, a pesar de que en AFOGRA solemos hacer visionados en papel con bastante frecuencia.

Debido a que el revelado y, sobre todo, el positivado de las copias se ha hecho en un laboratorio industrial y con calidad de aficionado, se permitió a los autores, una vez escaneados sus negativos, mejorar las copias de forma digital con la premisa de solo tocar parámetros básicos sin reencuadres ni otro tipo de manipulaciones excepto paso a blanco y negro.

Después del visionado en papel se hizo un visionado en pantalla con estas fotografías escaneadas y “reveladas” digitalmente que fueron comentadas de forma distendida y animada por todos los asistentes.

Cada autor eligió una fotografía que pasa al archivo de AFOGRA.

La Junta Directiva de AFOGRA quiere agradecer a los socios participantes en esta actividad su buena disposición y colaboración para hacer de esta jornada una actividad entrañable en buena compañía que, sin duda, repetiremos.